Las empresas familiares representan entre el 70% y el 95% de todas las entidades comerciales existentes en el mundo. Además, crean entre el 70% y el 90% del PIB mundial anual y entre el 50% y el 80% de los puestos de trabajo. En Colombia se estima que cerca del 70% de las empresas son de carácter familiar, casi superando las 500,000 sociedades.
Se considera fundamental que los grupos familiares preparen formalmente a las futuras generaciones que estarán a cargo de dichas empresas. Este proceso debe asegurar que los miembros seleccionados para el relevo generacional cumplan con los requerimientos de educación, experiencia, preparación individual y conexión con el negocio, necesarios para ejercer un liderazgo responsable a futuro ya que esta nueva generación puede ser un aporte invalorable de energía, profesionalidad y posibilidades de expansión.
El desarrollo de un plan ordenado de sucesión generacional, acompañado de buenas prácticas de administración corporativa, es el secreto para la sostenibilidad de los grupos familiares en el largo plazo.
La entrada de nuevas generaciones en la empresa familiar siempre supone un reto para la familia empresaria, por eso es importante planificar esta incorporación con cuidado y con suficiente antelación. El hecho de que la familia y la empresa interactúen estrechamente da lugar a desafíos específicos, pero también ofrece oportunidades únicas. Por supuesto las posibilidades y formas de incorporación van muy ligadas al tamaño de la empresa y la generación en que se encuentra la familia propietaria.
El sucesor, luego de llevar esa pasión por la empresa y por transmitir ese legado familiar, fortalece los lazos de cercanía con los trabajadores, clientes, proveedores, distribuidores y se convierte en amigo de todos porque comprende que la amistad es un elemento muy importante en el progreso de la empresa, de tal manera que se siguen fortaleciendo vínculos fuertes y sólidos basados en el respeto, trabajo en equipo y buen trato a todas las personas con quienes se tiene contacto.
Es importante desarrollar dentro de las nuevas generaciones la capacidad de innovar en distintos ámbitos, pero sobre todo dentro de la empresa familiar es importante seguir innovando en esa amistad, en seguir haciéndonos amigos y aliados de nuevos clientes, proveedores y colaboradores y en general de todas las personas con quienes tenemos contacto.
Finalmente, recordar que la formación y educación del sucesor en los valores de la empresa, y el respeto por los demás, es lo que determinará el éxito de la nueva generación.
En Artecma, somos una empresa familiar, que está innovando, creciendo y cambiando para brindar lo mejor a nuestros amigos y aliados, conservando fielmente nuestro legado, hacia un futuro promisorio lleno de retos, sueños y éxitos.